Despedimos los juegos de Río 2016 con sabor agridulce, por un lado, los mediocres resultados de la delegación de atletas mexicanos, por otro la nostalgia de haber visto las hazañas deportivas de los mejores del mundo.
Como cada Olimpiada hubo sucesos extraordinarios en Río. Cumpliendo con las expectativas el cierre fue espectacular, quizá lo más recordado del evento no hable de Brasil, sino de Japón. El cambio de estafeta para Tokio 2020 fue una cátedra de marca nación.
Haciendo una reflexión sobre los aspectos que integran una marca país, Japón ha aportado al mundo su cultura y cientos de productos de consumo, por algo se encuentra entre las cinco naciones más valoradas del Top Cuntry Brands. Aquí las razones de su éxito.
1. Japón no existe sin los japoneses
Japón ha cultivado su identidad con creatividad e innovación. Su gente es la autora de cada éxito, personas comprometidas en lo individual y en grupo. Estructuras sociales que premian la visión a largo plazo, los CEOs japoneses se distinguen por estilos de vida austeros, gente que se dedica a disfrutar de su trabajo.
Quizá la primer enseñanza que deja este teaser de la cultura nipona es que debemos vernos hacia el interior, señalarnos las verrugas de la mediocridad. Sacar de nuestra conciencia la idea rancia de que ser excelente quita lo divertido. Regodearse de la ignorancia solo les enseña a nuestros niños a perpetuar la mediocridad.
Idolatrar la prepotencia, el plagio, el dinero mal habido, el poder como instrumento de descalificación, la posición desde la apariencia. Todos aspectos regresivos que deben mutar al fomento al conocimiento, impulso a las nuevas ideas, reconocimiento a quienes generan empleos o promueven estilos de vida ad-hoc a nuestra realidad. Para mostrar esa frescura, debemos volver al inicio, encontrar nuestros puntos en común y mostrar lo bueno de este país: los mexicanos.
2. Las marcas son el distintivo de la nación
Cuando el fontanero español Mario Barroz se tropezó con una tortuga mientras andaba a prisa por la calle, no imaginó que inspiraría a un turista japonés que por casualidad lo seguía con la mirada. Ese viajero era Shigeru Miyamoto, el creador de Mario Bros., un talentoso diseñador de videojuegos.
Un país que crea marcas crea consumo pero también cultura. La lista es amplia, Pokemón Go, Nintendo, Toyota, Nissan, Toshiba, Sanrio, entre muchas. Al parecer la estrategia para los Juegos Olímpicos es hacerlos parte, algo así como ganar–ganar.
3. Símbolos mundos diferentes
El sol naciente es un elemento perfecto para crear un sistema de símbolos, pero lograr que ese código se aplique en diferentes recursos retóricos es un trabajo delicado. En el teaser de Tokio 2020 se pudo ver un estupendo manejo de la marca de los juegos en todos sus niveles de comunicación: el story telling de la campaña, la tipografía es un acierto, la paleta de color tecnológica pero sin caer en la estridencia, el audio de la secuencia. El circulo rojo como motivo, centro, pretexto y símbolo.
Según Wally Olins la identidad de un país está compuesta por muchos mundos donde se combinan el arte, el consumo, los deportes, las creencias así como la definición que cada quién tiene de sí mismo como ciudadano de esa nación. Japón lo tiene todo, creo que será una identidad que disfrutaremos tanto como los juegos.
¿Ustedes qué opinan?
Vía: Merca 2.0